El Gobernador y la Vicegobernadora Entregaron en Río Grande distinciones a Veteranos de Guerra y a Familiares de Fallecidos en Malvinas

En el marco de la conmemoración de los 40 años de la Gesta de Malvinas, el Gobernador de la Provincia de Tierra del Fuego AIAS, Gustavo Melella y la Vicegobernadora, Mónica Urquiza, encabezaron el acto de entrega de medallas y diplomas a veteranos de guerra y a familiares de fallecidos. El acto se llevó a cabo en la Carpa de la Dignidad en la ciudad de Río Grande.

Participaron el Intendente de Río Grande, Martín Pérez, el Secretario de Malvinas, Antártida e Islas del Atlántico Sur y Asuntos Internacionales de la provincia, Andrés Dachary, el Presidente del Centro Veteranos de Guerra Malvinas Argentinas, Raúl Villafañe, miembros del gabinete provincial, diputados nacionales, senadores nacionales, legisladores provinciales, concejales, autoridades de diversas instituciones del orden local, provincial y nacional, veteranos de guerra y familiares.

Durante su discurso, el Gobernador dijo que “hoy estamos en un día muy especial, porque el Pueblo de Río Grande, el Pueblo de Tierra del Fuego quiere rendir honor a nuestros veteranos. Les quiere dar las gracias con pequeños gestos, pero gestos que nos ayudan a mantener bien en alto la defensa de nuestra soberanía sobre Malvinas”.

“Gracias a esa llama, a ese fuego en un tacho años atrás que después se desparramó por toda la Argentina mantenemos viva la lucha y la memoria por nuestras Islas”, agregó.

Además el Gobernador expresó que “es un día para dar gracias y para tener presentes a aquellos que no están. Por eso queremos hacer un pequeño gesto con estas medallas, pero además entregar una medalla al Presidente del Centro de Veteranos para que quede en resguardo en honor a todos los Veteranos que están a lo largo y ancho de nuestro país y del mundo, y también en honor a aquellos que dejaron su vida en la tierra de Malvinas”.

Por su parte, Villafañe agradeció a los presentes y sostuvo que “todo lo que se pueda hacer por la Causa Malvinas es bueno para nuestros Veteranos, para nuestras familias. Es una caricia al alma y al corazón después de momentos tan difíciles que tuvimos que atravesar con la pandemia”.

“El pueblo de Río Grande nos sostiene, nos acompaña. Ver a los chicos y chicas que nos visitan en la carpa, que charlan con nosotros, que se interesan, es algo muy importante para seguir adelante, para que nuestra ciudad siga siendo la Capital Nacional de la Vigilia”, finalizó.